D. José L. Ferrer fundó en Binissalem en el año 1931 las Bodegas que hoy llevan su nombre. Unas 130 Ha. de viñedo situadas en la Comarca de Binissalem, junto a la uva adquirida a los viticultores de la zona, permiten alcanzar una producción de 1.000.000 de botellas anuales. Las uvas autóctonas Manto Negro, Callet y gorgollassa producen unos excelentes tintos apropiados para la crianza, que se realiza en barricas de roble americano y francés en la cava de la Bodega, dónde también reposan en botelleros, redondeando su crianza, los vinos de Reserva. Con la uva blanca Moll y Giró ros se elaboran frescos y afrutados vinos blancos de singulares características. Las Bodegas has sido objeto de varias ampliaciones para poder, combinando métodos tradicionales con la más moderna tecnología, seguir elaborando y envejeciendo vinos con esmero y dedicación heredados del fundador de esta bodega familiar.